sexta-feira, 13 de junho de 2014

O crucifixo não ofende ninguém, mas inquieta...

Nestes últimos tempos, pela Europa, principalmente, temos assistido a movimentos contra manifestações religiosas, principalmente contra o Cristianismo.
Surgiu, nos vários artigos desta temática uma palavra que expressa bem o tempo em que vivemos: CRISTOFOBIA. Porquê?
Será que Cristo mete medo ou temos medo de nos comprometer em Cristo? É que Cristo incomoda. Vemos isso nas acções deste Papa Francisco. É frontal, mas também carinhoso para com os pecadores. Tal como Cristo o foi.
Nesta manhã, estes pensamentos apareceram, pois deparei com uma referência de um movimento contra a presença de crucifixos nos hospitais. Uma extensão da acção para a eliminação da presença do crucificado em lugares públicos, pois dizem é um atentado contra a liberdade de expressão...
Eis o documento:

Cristo molesta. Su imagen en la cruz puede causar infecciones, graves enfermedades, serios problemas de salud. Eso dice Compromís, una coalición formada por nacionalistas y comunistas que exige la retirada de los crucifijos de las habitaciones de los hospitales y si tú y yo no lo evitamos, va a presentar una moción en las Cortes valencianas para borrar la Cruz del espacio público. 
Pide al director del hospital donde se ha iniciado esta campaña, en Castellón, que no ceda a esta nueva ofensiva contra los símbolos religiosos de la mayoría.
Sabes que si lo consiguen, después de Castellón vendrá Valencia, y luego Barcelona, y luego Madrid... y el resto de España.
Dice el partido que encabeza esta campaña contra los creyentes (y cuenta con representación en el Congreso de los Diputados) que los enfermos de los hospitales no deben ver "un cuerpo semidesnudo, famélico y lleno de heridas clavado en una cruz".
Ningún paciente se ha quejado por la presencia de crucifijos en las habitaciones. Tampoco lo han hecho los médicos, ni las enfermeras, ni nadie. Solo ese grupo político que quiere acabar con los símbolos religiosos de la mayoría pasando por encima de la voluntad de esa misma mayoría.
Para este grupo de nombre tan inadecuado, Compromís (Compromiso), la simple presencia del crucifijo es ofensiva y con su propuesta de barrer todos los símbolos religiosos buscan fustigar a los creyentes, expulsarnos de la vida pública. Porque para construir el mundo que pretenden imponernos, la imagen de Cristo es un obstáculo insalvable y necesitan derribarla a cualquier precio.
Compromís va a presentar una moción en las Cortes Valencianas por la retirada de los crucifijos del Hospital Provincial de Castellón. Y continuarán persiguiendo cualquier manifestación de religiosidad hasta arrinconarla definitivamente. Depende de ti y de mi, de todos nosotros, plantarles cara y defender nuestras creencias.

Segue a hipotética carta para o director do hospital: 
Dr. Rafael Arce, director gerente:

He sabido que, desde determinados sectores, se está exigiendo la retirada de los crucifijos que hay en las habitaciones del Hospital Provincial de Castellón que usted dirige por considerar que resultan ofensivos y que atentan contra la aconfesionalidad del Estado.

Con todo respeto, le pido que no ceda al chantaje del laicismo intolerante que pretende expulsar del espacio hospitalario un símbolo no sólo profundamente venerado y respetado por los creyentes, en el que, además, muchos encuentran consuelo en la enfermedad, sino un elemento indiscutible de nuestra identidad cultural cristiana.

Tengo la seguridad de que sabrá usted hacer frente a esta pretensión intolerante. Si es así, le doy las gracias anticipadas por defender la razón frente a la intransigencia.

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